En el mundo de la publicidad hay una extraña pareja. No pueden trabajar el uno sin el otro pero chocan constantemente: el copy creativo y el director de arte.
Podemos comparar la relación que hay entre copy y arte con un matrimonio de conveniencia.
Es una historia de amor que, según en qué momentos, puede parecer que está abocada al fracaso. Sin embargo, pese al interés inicial (interés laboral, claro está), finalmente acaba surgiendo el amor y ambas partes comprenden que no pueden vivir la una sin la otra.
A lo largo del tiempo se han ido creando una serie de estereotipos alrededor de la figura del director de arte y del copy.
Dicen las malas lenguas que el copy trabaja entre poco y nada, que el arte sólo sabe hacer dibujitos. Dicen también que el copy es ordenado y el arte un puro caos.
Como en toda relación, deberás adaptarte a tu pareja y ser muy paciente. Si consigues acoplarte a su estilo sin abandonar el tuyo, seréis imparables.
Los creativos brasileños Caio Pena, Henrique Parada y Letícia Hanower han plasmado esta relación de amor-odio que se produce entre estos profesionales. Ahora, siéntate y analízate. ¿Tienes alma de copy o de director de arte?
De todas formas, nuestro consejo es que, siempre que tengas la oportunidad, ponte en la piel de ambos puestos. Sólo de esa forma, sabrás con seguridad cuál es tu camino. Y si te equivocas, no te preocupes, que siempre hay tiempo para rectificar 😉